Jalogüin está a la vuelta de la esquina y no les voy a mentir, es de mis fechas favoritas. Creo que ni es sorprendente, considerando lo macabro que puede ser mi humor. Pese a toda la controversia que envuelve a estas fechas, ustedes saben que a mí eso me tiene sin cuidado y me encanta. Voy a celebrarlo como me venga en gana y no me importa a quién pueda incomodar n_n
Siempre he tenido esta fascinación por lo paranormal, por la adrenalina que el miedo produce en mis venas, por las historias de terror y por lo desconocido. ¿Por qué? No estoy segura si fue porque de chiquita me caí y me rompí la maDIGO, porque crecí viendo programas como Coraje, el Perro Cobarde, Escalofríos o películas como It (Eso, El Payaso Diabólico) o Chucky. Ño sé. Hay algo dentro de mis entrañas que se remueve en una vibración armoniosa y placentera cada vez que me topo con este tipo de situaciones extraordinarias.
Bueno, eso en la vida ficticia, porque en la vida real soy muy miedosa, lo cual es un poco incoherente. Pero bueno.
Para los que no lo sepan, jalogüin es una fiesta llena de tradiciones y misterios. Historias interesantes y monstruos sacados de nuestras más profundas pesadillas.
Sé que hay mucha gente a la que no le gustan este tipo de cosas (Por ejemplo, mi mamá) y yo no entiendo porqué, pues el miedo es un arma biológica que nos ha permitido sobrevivir. Quiero decir, si no sintiéramos miedo, no nos cuidaríamos y ya para hoy estaríamos bien extintos alv. Piénsenlo como un regalo de la evolución.
Además, el miedo a lo desconocido siempre va a estar. Tengas o no miedo, eso ahí está, lo inexplicable. Fingir que no existe no es como si lo fuera a desaparecer.
Jalogüin es una fiesta de origen pagano que tiene raíces en un festival celta llamado Samhain, que es como "fin de verano" y era celebrado en Irlanda por el fin de las cosechas y da la casualidad de que coincide con el solsticio de otoño.
Se creía que por estas fechas, los muertos, las ánimas, los fantasmas, los espíritus, como sea que ustedes les llamen, regresaban al mundo de los vivos y caminaban entre nosotros. Turbo creepy af. También se creía que estos espíritus podían poseer humanos y hacerlos hacer chingaderas y pues, para evitar eso, tenías que ofrecerles algo. De ahí el "trick or treat" (trato o truco/ dulce o truco), el tan famoso llamado a la hora de pedir dulces (O más bien canjearlos, chantajear a los demás para que te den dulces a cambio de no hacerles una travesura, wtf).
Para evitar que los pobladores se vieran en estos aprietos, se disfrazaban con las pieles de los animales para pasar desapercibidos. También decoraban sus casas con cráneos y demás cosas desagradables para causarles pavor a los muertos -¡Ja!- y de ahí la famosa tradición de decorar las casas, salones, oficinas, etc, con motivos repugnantes y aterradores.
Posteriormente, Roma adaptó esta fiesta al catolicismo y la llamó "All Hallows Eve", derivación de Halloween (JALOGÜIN).
El jalogüin es una fiesta que está basada en el miedo, obviamente. Espectros, demonios, brujas, fantasmas, y demás fuerzas sobrenaturales que llegan a nuestro mundo a hacer de las suyas (como si no tuviéramos ya suficiente en nuestro plato de la propia humanidad) y pues el chiste es escondernos para no sufrir las consecuencias de estas malévolas voluntades.
Pero vamos, a pesar de todo lo malo que podría ocurrir (¿Qué es lo peor que podría pasar, lol?), ¿NO LES DA CURIOSIDAD?
Tanto que no conocemos, tanto que necesitamos saber, aprender y entender. Omg. El miedo es lo último de lo que deberíamos preocuparnos.
En jalogüin también es una fecha en donde puedes ser un miedoso marica -como yo- y es socialmente aceptable.
Pero los invito a abrir sus mentes y ver los siguientes puntos:
1.- Es una fiesta inocente. Nada que ver con el satanismo ni busca invocar espíritus malignos ni jugar con satanás o algo así. Ño. Es una mera fiesta, como ya resumí allá arriba, que coincide con el solsticio de otoño y que celebraba el fin de las cosechas irlandesas. Sí, regresan los espíritus y chalalá PERO TAMBIÉN EN DÍA DE MUERTOS Y NADIE SE ANDA QUEJANDO, WTF.
2.-No será tradición que se inició en México, pero TAMPOCO LA NAVIDAD. Poco tiene que ver con que "sea tradición extranjera". México, el actual México y el México de hace cien años, es un México multicultural. Hemos apropiado tradiciones, hábitos, creencias, externas a lo que aquí se sembró. No me salgan con mamadas, disculpen. Navidad no se inventó en Oaxaca. Las pascuas no son cosa de los aztecas. San Valentín no fue santo mexicano. Detengan su ridiculez.
Adoptar tradiciones, hábitos, etc, etc, etc, a lo que ya obtenido, es parte de un proceso de globalización en el cual todos participamos, lo queramos o no.
Chulos se ven quejándose de que no quieren el jalogüin porque no es mexicano PERO SÍ USAN EL FEISBUCK. Qué cultos y defensores de la cultura mexicana se ven cuando rechazan a los que sí disfrutamos de estas fechas por "adorar cosas extranjeras" cuando ustedes van a comprar sus cosas al Walmart. O sea, jelou.
Adáptate o muértDIGO. Así es esto. ¿No quieres ser parte del mundo? Bien, no lo seas. Pero no seas hipócrita. Todos coludos o todos rabones (?
Qué chido nada más tomar lo que sí nos conviene y lo que no nos gusta, pos ya no.
Guess what? Jalogüin es una fiesta padre y ya.
3.-Es divertido. ¿Qué más quieren? Es una fiesta que nos invita a reflexionar sobre muchas cosas, pero en especial, nos hace pensar en la vida y en la muerte. En esta fiesta vemos lo que más nos aterra como parte de un mero espectáculo. Le hacemos frente. Vamos a fiestas, nos disfrazamos y asustamos a los demás. Nos asustan. Es divertido. Nos da pie para pensar en lo que nunca pensamos, en imaginar, en soñar, en temer. En crear. Eso es muy cool.
Como escritora mediocre e histriónica, puedo verlo como algo muy cool.
Tampoco es obligación, no me malentiendan. Sé que hay gente allá afuera que de veras no le encuentran lo placentero a esto y es muy respetable. Todo lo que digo es que si a ti no te gusta, no quiere decir que los demás tampoco tenga que gustarles.
Si tus argumentos se basan en libros religiosos o pensamientos conservadores, mejor guárdatelos, porque además de amargarles la fiesta a los demás, pareces el tío loco que le grita a la luna porque brilla cada noche. Stop.
En lo personal y como ya he dicho, jalogüin es de mis fiestas favoritas. Así hubiera sido mexicana o hubiera sido inventada en Júpiter, a mí eso no me importa. Me gusta el concepto, me gusta la historia, me gusta el potencial y lo disfruto tanto como puedo. Soy feliz así, aunque de noche me dé un chingo de miedo irme a dormir ge ge ge.
Finalizando este post, quiero desearles un muy feliz jalogüin a los que lo celebran, y a los no también. Que ningún espíritu malévolo los encuentre y reciban muchos dulces. Sean lo que quieren ser hoy (o sea, 30 y 31 de octubre), es la perfecta oportunidad de soltar a la fuerza sobrenatural que llevamos dentro.